Sobre 3 Ha en el Roussillon está basado el proyecto de Laurence Krief. garnacha y cariñena joven junto con algunas cepas centenarias de esta última variedad plantadas sobre esquistos conforman las variedades con las que elabora 5 vinos diferentes de los cuales hemos catado cuatro de ellos.
No utilizan tratamientos químicos y nos cuenta Laurence que hacen los trabajos de la tierra con tracción animal y la viticultura respeta los ciclos lunares.
RESTAKÉ 2012, garnacha gris en inox y ligero paso por barrica. Es un vino sencillo con recuerdos a manzana asada y frutos secos. En boca es ligero de paso rápido y final astringente.
AKOIBON 2012 de mourvèdre de 15años, ha sido nuestro vino preferido no por considerarlo el mejor, si no por su personalidad rústica y la profundidad en su fondo de boca y muy marcado por el fondo «natural» aunque con equilibrio.
LA TRANCHÉE 2012 de garnacha 100%, de capa baja, cerrado aunque resaltaban notas resinosas que en boca no molestaN y muy fino en boca con excelente tanino de fruta.
KM 31 2012, de cariñena y garnacha al 50%, es un vino más cuidado que los anteriores, muy sedoso en boca, equilibrado, y con protagonismo de la sutileza en boca por la edad de las cepas centenarias.
Nos ha parecido una bodega interesante a pesar de su corta trayectoria, seguiremos la pista especialmente AKAIBON y KM31 en un par de años para ver su evolución, aunque tenemos la impresión de que Laurence busca intensidad de fruta y potencia en boca.
Todos los vinos fueron servidos en formato magnum.